Manka Kusi: El camino de Ida Ramos en una olla común de Manchay
En el corazón de Manchay, un lugar cuyo significado en quechua es «miedo», ha experimentado una transformación notable en los últimos años, evolucionando de la incertidumbre a un faro de esperanza y solidaridad. Durante la pandemia de la COVID-19, en respuesta a la creciente necesidad de apoyo alimentario en todo el país, se formaron nuevas ollas comunes, uniendo a vecinos y voluntarios para ayudar a las familias en dificultades.
En este contexto de unidad y solidaridad, la Asociación UNACEM, en colaboración con Alicorp y ADRA Perú, lanzó el programa «Manka Kusi» en Manchay, Pachacamac, respaldando un total de 57 ollas comunes en la región. Detrás de esta noble labor, encontramos a Ida Ramos, representante de la olla común «Las Maravillas» de Manchay, quien comparte su inspiradora historia de servicio y compromiso con la comunidad.
Ida, la tercera de diez hermanos, nunca habría imaginado que se convertiría en parte del equipo líder de una olla común, brindando ayuda y esperanza a quienes más lo necesitan. Hoy, agradece la oportunidad de hacerlo junto a su comunidad, transformando vidas y participando activamente.
Gracias a Manka Kusi, estas valiosas instituciones reciben capacitaciones esenciales para liderar, abordando temas como alimentación saludable, gestión financiera y salubridad. La participación activa de Ida en el programa la llena de orgullo, al ver el impacto positivo que las ollas comunes tienen en los más vulnerables, incluyendo niños, adultos mayores y personas con discapacidad. Además, las ollas comunes «Las Maravillas» y «Los Jardines de Retamal» han sido dotadas de nuevos espacios, equipados con tecnología de fibrocemento, garantizando un entorno seguro y saludable para servir a la comunidad.
La inauguración de estos locales marcó un emocionante momento para la comunidad, y la presidenta de «Las Maravillas», Luzbith Ornorbe, expresó su deseo de que más empresas privadas se unan a la noble causa de apoyar a la sociedad peruana.
Manka Kusi continúa iluminando las vidas de más personas en Manchay y Pachacamac, brindando un rayo de esperanza. En un mundo donde a menudo nos enfrentamos a desafíos abrumadores, la solidaridad sigue siendo nuestra mejor herramienta para co-construir un futuro lleno de esperanza y oportunidades para todos.